Reflexión a partir de un vídeo de Martin Varsavsky

Este vídeo del conocido empresario de origen argentino Martin Varsavsky, me lleva otra vez a hablar (en parte también a raíz de un comentario al anterior post sobre el tema) sobre la responsabilidad moral de los empresarios en la crisis económica que vive España. Es evidente, como ya dejaba ver en la anterior entrada, que no todos los empresarios actúan inmoralmente y que … Read More

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Ricardito haciendo de las suyas, una vez más. Pobre hombre.

Ayer se despachaba el capullito de Ricardo Galli este post en el que viene a decir (ya les ahorro yo el suplicio de leerlo) que la prensa tradicional manipula las noticas, y la "información 2.0" es mucho más veraz, a cuento de un artículo en el que El País llega a la conclusión de que el mercado de las tablets (léase el iPad, por ejemplo) combinado con la costumbre patria de descargarse por la patilla toda clase de contenidos (en este caso libros … Read More

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Magnífico retrato del mundo bloguero español a través del análisis de un caso cortesía del señor Donen Rike Dans.

Hace poco El Desclasado, en esta entrada debatía acerca de la evidente falta de independencia de los medios de comunicación en España. La conclusión, era que en contra de lo que en un primer momento puede parecer, esta dependencia de los medios no sirve a intereses políticos (tal vez es esto lo que quieren hacer ver a los ciudadanos los mass media) sino que simplemente los grandes grupos empresariales de comunicación españoles, se venden, como no … Read More

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Impresionante la «estética» de algunos «empresarios» de las TICs españoles.

De la responsabilidad moral y social de los empresarios Llevaba tiempo queriendo hablar de este tema, el de la responsabilidad moral y social de los empresarios, sin saber exactamente la manera en que quería hacerlo, cuando prácticamente por casualidad di con un post de Carlos Blanco que me hizo reflexionar sobre este tema y sobre otros más que lo tocan tangencialmente. Carlos Blanco tiene toda la pinta de ser un tipo bastante peculiar (aunque admito que solo es una especulación, puesto que no tengo e … Read More

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Una de las armas que suele usar Donen Rike para manipular a su gusto la realidad es la costumbre de ofrecer enlaces que supuestamente apoyan sus teorías. Enlances que, dicho sea de paso, creo que nadie se molesta en leer, y enlaces, también que suelen apuntar a fuentes tan fiables como blogs de completos desconocidos que esgrimen «datos» sacados de Dios sabe donde. Por fortuna, la información veraz en Internet, puede estar a un click de la manipulada, y precisamente ahí está lo que distingue a una mente crítica de un borrego que se cree el primer gráfico de Excel que le ponen delante de las narices: el primero siempre intentará contrastar y verificar la fiabilidad de la información siempre que tenga oportunidad. Y esas oportunidades existen precisamente porque Internet las pone a disposición de cualquiera con el suficiente interés como para investigar un poco por si mismo.

Hace ya unos meses, Dans tuvo la desfachatez de titular «mentiras» a esta entrada en la que pretendía demostrar que el cine en general, y el español en particular, pasaban por aquel entonces su mejor momento desde hace muchos años, en cuanto a recaudación en taquilla y afluencia de espectadores. Como digo, su «prueba» era como siempre, un link a esta entrada del blog de una completa desconocida, que decía a su vez algo que ya nos ponía sobre la pista de la mentira (esta sí, y con mayúsculas) de Dans: el récord de taquilla, no era más que un máximo puntual, referido solo a un fin de semana, en el que para más inri, coincidieron varios estrenos importantes en la cartelera española.

La puntilla a esta «información» de Dans me llegó hace unos días, al dar casi por casualidad con esta otra entrada en la que los datos ponen de manifiesto sin ningún lugar a dudas el tremendo descenso de espectadores en los cines españoles, que se hace absolutamente evidente cuando se contempla este gráfico, con la perspectiva que da la serie temporal de más de una década de datos, y no los manipulados datos de Dans de solo un fin de semana:

Hay que tener la cara tan dura como Dans para afirmar que la industria del cine español es una llorica que se queja aún cuando pasa (según Dans y la blogera de turno, claro) por su mejor momento, ignorando estas cifras que muestran claramente y sin lugar a dudas que la industria española ha perdido más de la mitad de los espectadores que tenía en 1999, y bajando. Y ojo, evidentemente el gráfico muestra los espectadores totales, no solo los que acuden a ver cine español.

Una vez más, se comprueba que las mentiras de Dans se deshacen con un solo click, y con una mínima profundidad de análisis que al parecer sus comentaristas no tienen, o si tienen ya se encarga Don Enrique de censurar los comentarios correspondientes. Afortunadamente todavía quedamos algunos a los que no nos impresiona el lenguaje cancamusero de Dans y que intentamos poner de manifiesto las tonterías 2.0 que destila Dans en la mayoría de sus post.

Seguiremos informando.

Hoy Dans se despacha con una entrada de promoción a los amiguetes, con nulo interés para el resto de la Humanidad (si es que alguno de sus post tiene interés de verdad para alguién, más allá de echarse unas risas con las gilipolleces que dice). Hoy le ha llegado el turno a una completa desconocida (que algún parentesco o relación tendrá con Dans, aunque obviamente me la suda) que le ha hecho una entrevista en la que Dans recurre a los tópicos y tonterías de siempre, y que merecen ser citadas aquí, por lo de siempre; por un lado para que nos hagamos una idea del nivel intelectual de Dans, y por otro, simplemente para reírnos un rato, que nunca está de más. Por eso me he propuesto como ejercicio comentar y dar réplica a algunas selectas contestaciones que Dans ha dado a su amiguita. Vamos allá:

¿Le afecta el odio “manifiesto” de algunas comunidades de internautas?

En absoluto. Son muy pocos comparativamente, y se cansan siempre en seguida, no me aguanta ninguno ni medio asalto. Hay que entender que a partir de un cierto nivel de visibilidad, sería absurdo e iluso esperar caerle bien a todo el mundo. En realidad, el fenómeno de identificación negativa hacia una persona con cierta visibilidad está muy estudiado en la sociología: cuando una persona manifiesta algún tipo de “odio” o “fijación” por alguien que no conoce en absoluto, y es capaz de poner la mano en el fuego asegurando que su carácter es de una manera determinada, o de dedicar su tiempo a elaborar páginas que invariablemente acaban abandonadas y sin interés alguno, está en realidad proyectando sus propias frustraciones personales sobre la imagen de esa persona, atribuyéndole unas características que, en realidad, provienen de sí mismo. Es algo inevitable, pura sociología y naturaleza humana. Al final, cuando has demostrado una trayectoria determinada, y tienes muchos buenos amigos que te conocen y saben cómo eres en realidad, ese tipo de actitudes te parecen simplemente patéticas, casi enternecedoras. Es bueno que estén ahí, son la prueba de que lo que haces, importa. Y sobre todo, te echas unas risas.

Sí, precisamente eso es lo que hacemos por aquí y por aquí por ejemplo, desde hace unos años (qué «medio asalto» más largo,¿ no?). No sé si comparativamente seremos muchos o pocos, más que nada porque yo no me aventuro a conclusiones precipitadas sin datos de por medio, pero sí, Enriquito, ya sabemos que tú te tiras a la piscina a sacar las conclusiones que te sale de la polla aún cuando los datos objetivos indican todo lo contrario, y luego encima te las das de científico. Pero ya se sabe, que la realidad 1.0 no te vaya a joder una buena mentira en la Web 2.0. Ya sabemos que el título de Biólogo parece que te autoriza para hablar de alta tecnología sin tener ni idea de lo que hablas en la mayoría de los casos, pero parece también que ahora te has metido a sociólogo. Se ve que en tu Universidad los títulos los regalaban en packs o algo, como hace el IE, que los vende por un nada módico precio. Como «ejsperto» en sociología te marcas la teoría de que (sic): «el fenómeno de identificación negativa hacia una persona con cierta visibilidad está muy estudiado en la sociología: cuando una persona manifiesta algún tipo de “odio” o “fijación” por alguien que no conoce en absoluto, y es capaz de poner la mano en el fuego asegurando que su carácter es de una manera determinada, o de dedicar su tiempo a elaborar páginas que invariablemente acaban abandonadas y sin interés alguno, está en realidad proyectando sus propias frustraciones personales sobre la imagen de esa persona, atribuyéndole unas características que, en realidad, provienen de sí mismo. Es algo inevitable, pura sociología y naturaleza humana». Pero claro, como siempre tus teorías afectan a los demás, pero a ti no, porque «noslomismo», claro:

Debe ser que llamar «hijos de puta con mucho tiempo libre» a un conjunto bien definido de personas, se hace de buen rollo, sin esconder ningún odio por ellos. Claro, como no se nos había ocurrido antes…los ojos inyectados en sangre cuando sueltas «hijos de puta», va a ser que no son del rencor que llevas dentro hacia algunos, lo más seguro es que sean una malinterpretación nuestra, que vemos ira en tus ojos cuando lo más seguro es que se trate solo de los frutos de la resaca de los cubatas que te tomaste a nuestra salud con la pasta que se levantó tu amiguito Anil de Mello, en paradero desconocido después de choricear todo el dinero que pudo y no pagar a sus empleados de Mobuzz lo que les debía. Eso también debe ser como tú dices «inevitable, pura sociología y naturaleza humana».

¿Podría dar una valoración del famoso y polémico manifiesto? ¿Sirvió de algo? ¿La reunión “secreta” posterior provocó la fracturación del grupo inicial de apoyo?

Aquello sirvió para demostrar que no se puede gobernar de espaldas a la red, porque la red es capaz de organizarse y expresarse de manera clara y a gran velocidad, con mucha fuerza mediática. En la práctica, sirvió para que el gobierno intentase moderar de alguna manera una parte de la LES que nunca debió llegar a ella, y que pasó de ser una aberración y un ataque a los derechos fundamentales, a ser un engendro jurídico, una justicia a la medida de las entidades de gestión, y una prueba de que en España, ante la ley, unos son “más iguales que otros”. En cuanto al grupo, en realidad nunca existió. Desde el primer momento se dijo claramente que no había grupo, sino que había personas. El “grupo” provenía de una selección llevada a cabo nada menos que por el Ministerio de Cultura, y en ningún momento pretendió erigirse en representación de nada ni de nadie, solo éramos personas que acudían a una reunión para dar una opinión y un punto de vista. Y en prácticamente todos los casos, ahí siguen estando.

«No se puede gobernar de espaldas a la red»…Guau…que miedo, que vienen los malotes amigos de Dans a poner orden en el país, temblad políticos, que aquí está la red de Dans que es capaz de sacar a gobiernos del poder, derrocar regímenes, monarquías y lo que haga falta. Pues vale, ahora en serio…hasta ahora lo que ha conseguido «la red» española es que le metan un gol por la escuadra con la más que posible aprobación de la Ley de Economía sostenible (aka «Ley Sinde»), disposición adicional incluida, gracias entre otras cosas a las puñaladas por la espalda ( y por donde haga falta) de aquellos que por mucho que lo nieguen ahora, se erigieron en «defensores de la red», pero que el tiempo está haciendo ver, que como manteníamos por aquí desde el principio, no van más que a su propia bola y a llenarse los bolsillos lo más rápido posible con sus negocietes de Internet, timando a los ineptos internautas y haciéndoles creer que luchan por cosas tan elevadas como la «libertad de expresión en Internet y la neutralidad de la red». Curioso que luego sean ellos los primeros en censurar en sus blogs las opiniones que le llevan la contraria, y que amenacen de muy malas maneras a quien se les opone (véase unos post más abajo como se las gasta Ricardo Galli, otro «defensor de la libertad en Internet»).

Y bueno…aquí lo vamos a dejar hoy, sin perjuicio de seguir en otro momento, porque la «entrevista» no tiene desperdicio…Algunos tenemos menos tiempo libre del que Dans imagina.

Revueltos andan los ríos de la Internet patria. Muchos ven en la más que posible aprobación de la Ley de Economía Sostenible (también conocida como Ley Sinde) un peligro para sus negocios de cortar y pegar. Todavía habrá quien intente hacernos colar que la ley será usada por el gobierno para cerrar las webs que le plazca, cuando la realidad es que la comisión administrativa que prevé la ley, no podrá siquiera actuar de oficio, es decir, solo podrá intervenir a instancia de los interesados (en este caso, los titulares de los derechos que pretende salvaguardar la disposición), con lo que difícilmente podrá ser usada por nadie a excepción de los autores o de las gestoras de sus derechos para cerrar nada, y recordemos también que los jueces se encargarán de velar porque no se vulneren derechos fundamentales en la clausura de las webs infractoras.

Sin embargo, lo interesante de la dirección que están tomando los acontecimientos no se queda en los hipotéticos y polémicos cierres de sitios, si no en como el poder político está manejando la situación, y el nuevo reparto de la tarta entre los diferentes medios de comunicación que tendrán que adaptarse más temprano que tarde al panorama que despliega la existencia de Internet como medio de expresión global. Porque…¿nadie se ha parado a pensar cual es la nueva estructura de medios que realmente conviene tanto a políticos como a los verdaderamente influyentes económicamente? El problema, más sutil de lo que parece, lo pone de manifiesto el hecho de que comentarios como este del sin par Krigan en el blog de Dans, pasen totalmente desapercibidos en su falta de profundidad de análisis, y no hagan saltar todas las alarmas. Atentos a la teoría tanto de “Krigan”, como de Dans, que unos comentarios más abajo está “totalmente de acuerdo” con la siguiente parrafada:

Ni siquiera voy a volver a mencionar la necesidad de especializarse [de los periodistas] (para las noticias de fútbol la peña se va a la web del Marca, no a la de El Mundo), aunque eso también sea cierto. El problema gordo que tienen es que toda su estructura de costes está adaptada a un mundo que ya no existe, un mundo en el que cuando alguien quería publicar algo, lo hacía a través de los medios. Envían periodistas a ruedas de prensa del gobierno, cuando lo que deberían hacer es pedirle al gobierno que les envíe el enlace al vídeo de la rueda de prensa (o buscar ese vídeo en la web del gobierno, que posiblemente ya lo esté poniendo ahí por sistema). Y lo mismo para las keynotes de Apple.

Llega un bloguero, publica lo mismo que ellos (porque el bloguero también ha visto el vídeo el gobierno o ha leído la nota de prensa), y se encuentran conque no son competitivos porque han pagado un par de horas de salario de periodista por una información que el bloguero ha obtenido gratis. Y eso cuando no mantienen a un enviado en Washington para recoger las palabras de Obama, o mandan a un reportero a Cupertino (California) para recoger las de Steve Jobs. Yo a eso le llamo un puto despilfarro. Por supuesto, los que dirigen ese despilfarro cobran un sueldo que te cagas.

Está claro que también existe el periodismo de investigación, en eso sí que es adecuado que se gasten las pelas, obtendrán una exclusiva. Pero, ¿gastarse todos los años una fortuna en obtener informaciones que los propios gobiernos y empresas ponen en Internet? Eso está a mil leguas de ser competitivo.

Es decir, que parece ser que Dans (como muchos otros “Ilustrados TICs”) sería feliz en un modelo informativo, en el que los periodistas se limitan a linkear o copiar y pegar lo que ofrecen las fuentes de información en sus respectivas webs, sin verificación alguna por parte de nadie, sin que medie ningún editor, y basándose en un grupo de bloggers que interpretan las noticias como le venga en gana, y sin jugarse el prestigio profesional consecuencia de sus posibles errores, cuando no directamente negligencias.

Dans y otros parecen confiar en una especie de “Internet inmaculada”, en la que la información circula libremente, pero claro, como por arte de magia, esta información es siempre veraz, autoverificable, y sin manipulación alguna. La idea, bien puede considerarse como de una candidez e inocencia insuperables, o bien como tremendamente interesada, desde el punto de vista de que intenta transmitir una ideología. Y la ideología que pretende difundir, en mi opinión es la de que hay que considerar Internet como a la salvadora de la información, como un sistema que, en contraposición a la politizada prensa tradicional de nuestro país, nos lleva de la mano a una información más libre, más veraz. Pero yo voy a ser algo más escéptico, y voy a poner sobre la mesa la idea de que tal vez, Internet no es el primer escalón hacia la información libre y veraz, si no más bien uno más hacia la manipulación y la desinformación.

Porque…¿de verdad podemos creer en una Internet en la que cada vez más la verdadera información se diluye en un inmenso ruido de gente diciendo chorradas y extendiendo bulos a una velocidad imposible con otros medios, donde nadie se molesta en verificar lo que le ponen delante de la pantalla, en la que muchos se esconden en el anonimato, o directamente en personalidades falsas para no jugarse el prestigio, o en la que es cada vez más fácil (dada la docilidad y falta de espíritu crítico de los “internautas”) manipular según convenga, y a quien convenga? Tal vez es más plausible pensar que el modelo de Internet, conviene más a los políticos y al poder que los “mass media” tradicionales. Al fin y al cabo, el fragmentar las audiencias, dividir a la opinión con un vacío “diálogo 2.0″ (que la mayor parte de las veces consiste en tirarse los trastos sin ningún argumento de peso de por medio) o la consiguiente pérdida de prestigio e influencia que conlleva esta fragmentación de medios y audiencias, creo que es una situación que solo puede favorecer a un poder político que intenta imponer su voluntad intentado encontrar la mínima resistencia posible. Y creo que unos medios fuertes (como venían siendo los tradicionales) que arrastraban al quiosco o a la radio o a la televisión a millones de personas en unas horas, sí que eran (o podían ser) un verdadero “cuarto poder” que cuando se lo propusiera, podría poner en evidencia los abusos de la clase política. Pero…¿de verdad alguien cree que un puñado de bloggers retransmitiendo por twitter las noticias que recibe del propio gobierno puede ofrecer resistencia alguna a éste o tendrían poder alguno? ¿O más bien no se convertirían automáticamente en un engranaje más del poder, que éste puede manipular a su antojo?

Para mi, la respuesta, es muy clara.

Después de la discusión mantenida por mi y por Cambiosocialya en esta entrada, me acabo de dar cuenta de que tengo en mi correo el siguiente mensaje del «Señor» Galli (sic),:

La próxima vez que vengas a mi blog a trollear, contradiciendo mis argumentos, usaré todos los medios a mi alcance para cerrarte el chiringuito. Sí, censura el que puede, no el que quiere. Publico tu IP y la de tu amiguito cambiosocialya porque me sale de los huevos, aunque sé perfectamente que es ilegal, es lo que merecéis hijos de puta como tú. Así que ya me puedes demandar o lo que te venga en gana, que mi blog es mio, y o se me lleva la razón, o para algo soy informático: para tumbar todas las webs que me lleven la contraria, como el en «Banday», y al que no le guste que se joda.

Sobre los motivos por los cuales piensa que cambiosocialya es el autor de este blog (o algo así, no lo dejó muy claro), preguntadle a él, porque yo no tengo la mínima idea.

Estos son los que intentan defender la libertad de expresión en la red. Que San Google os pille confesados.

Varios días sin postear, que además han sido bastante moviditos por la Internet patria, como consecuencia de la aprobación en Consejo de Ministros (en Sevilla, el primero de la historia en la capital andaluza) del anteproyecto de Ley de Economía Sostenible, también conocido como la “Ley Sinde”, por contener en su disposición final primera una polémica referencia a una hipotética comisión administrativa que tendrá la potestad de ordenar el cierre de las webs que vulneren los derechos de autor en sus contenidos.

Sin esperar al recorrido parlamentario que todavía le queda a la Ley para aprobarse definitivamente, la reacción de los sectores más radicales e intransigentes de Internet (más que nada porque en ello les va el negocio) no se ha hecho esperar. La más manipuladora y “evangelizadora” (en las propias palabras de su creador) ha tomado la forma de blog-panfleto de Weblogs SL, capitaneado por nuestro querido Julio Alonso. En este blog, que intenta hacer demagogia a base de mentiras, podemos encontrar una falacia tras otra, como la que se despacha el Señor Alonso en este párrafo:

El Consejo de Ministros acaba de aprobar el proyecto de ley de economía sostenible y de anunciar que lo envía a las Cortes para su tramitación parlamentaria. Todavía habrá que agradecerles que no lo aprueben por la vía rápida mediante un Decreto-Ley. Han transcurrido tres meses y medio después de que el lobby internacional del copyright introdujese, en un Anteproyecto de Ley de Economía Sostenible que nada tenía que ver con la propiedad intelectual, una ominosa Disposición Final Primera destinada a cerrar impunemente páginas web sin intervención judicial.

El artículo es una pura patraña, puesto que no solo la Ley no dice en ningún momento tal cosa, si no que expresamente indica que las resoluciones de la comisión serán remitidas a un juez que velará por que no se vulneren derechos fundamentales con los hipotéticos cierres de webs. Pero claro, el tontiastuto Alonso cuenta con que casi ninguno de los “internautas” que pueblan su blog habrá hecho el esfuerzo de siquiera leerse la consabida Disposición Final Primera de la Ley. Es también muy significativo que los ilustrados TICs no cesen de utilizar la palabra “lobby” para referirse a según que organizaciones, cuando precisamente estos días se dan los primeros pasos de la industria del marketing on line y los negocios en Internet para constituirse precisamente en eso, en un lobby que tomará la forma de Asociación Española de Economía Digital, auspiciada nada más y nada menos que por la propia patronal CEOE:

http://www.rizomatica.net/un-nuevo-lobby-la-asociacion-espanola-de-economia-digital/

Entre tanto, han sido llamadas por la ínclita Leire Pajín (que mala rima tiene esta mujer) un conjunto de personas (tal vez cabría decir personajes) relacionadas con los medios on line españoles para debatir sobre los puntos más candentes de la citada Ley de Economía Sostenible. La reunión, se ha saldado, como no podía ser de otra forma, con una posterior polémica en la que los propios internautas acusan de judas e hipócritas a varios de los representantes de la Internet “una grande y libre”. El PSOE no es un partido que se caracterice precisamente por sus escrúpulos, pero hay que reconocer que a astucia, le ganan pocas formaciones políticas en España (si bien es cierto que el nivel de astucia no está precisamente alto, en ningún grupo parlamentario). El truco consistió en esta ocasión, en llamar a declarar al inclasificable agente doble Ignacio Escolar, que tiene en común con Enrique Dans y el PSOE la habilidad de pensar una cosa, decir otra, y hacer otra aún distinta de las dos anteriores. Ciertos sectores de Internet no han tardado en renegar de la representación de Escolar, aduciendo (¡oh, que gran sagacidad!) que barre para casa y que solo mira por sus intereses empresariales en la red, a lo que Escolar ha contestado desde su blog que:

No nos hemos sentado como representantes de nadie. Lo hemos dicho mil veces: nos representamos a nosotros mismos.

La postura que hemos mantenido es la misma de siempre: que no puede aprobarse esa ley.

Supongo que esto da una idea de lo organizado que está el movimiento que vela por los intereses de los internautas, pero al menos hay que agradecer a Escolar la sinceridad de admitir que mira solo por su propio culo, y no intenta marear la perdiz disfrazando sus acciones de guardián de la libertad de expresión, como hace por ejemplo Julio Alonso, que declaró al finalizar la reunión (en la que no queda muy claro si asistió) lo siguiente:

Alguien se ha dado mucha prisa en contarle toda la reunión a Ramón Muñoz de El País para que la pudiera publicar. Esto, antes incluso de que todos los que estamos en ese grupo nos hubiéramos enterado de qué había pasado en la reunión. Esta bastante claro que la intención ha sido la de desacreditarnos a nosotros y de dividir el movimiento de oposición a la Ley Sinde. No sé quién habrá sido, pero, por diferencias entre lo que ha publicado y lo que nosotros habíamos hablado, sabemos que no ha sido desde este grupo. El texto, además, como suele ser habitual en los textos sobre este tema de Ramón Muñoz, mezcla verdades con interpretaciones y manipulaciones. La reunión era sin twitter, pero no era secreta ni “casi en la clandestinidad”. Los cuatro puntos que se han presentado no eran “para mejorar la ley”, sino para indicar cuales eran los puntos más importantes de oposición a la misma.

Es admirable como lucha Don Julio por que se cumpla la ley, cuando él mismo tiene causas pendientes en los juzgados. Alonso casi nunca decepciona, es épico como intenta defender la libertad de expresión en Internet reivindicando su derecho a twittear en una reunión ministerial, cual adolescente en clase que no puede mantener el pulgar quieto unos minutos para mandar sms a sus coleguitas mientras no lo ve el profesor. Ya lo he dicho muchas veces, pero lo diré una más: de verdad que si algunos no supiéramos la edad de estos sujetos, pensaríamos que no tienen más de 12 ó 13 años. Pero ahí están, reuniéndose con ministras para discutir sobre leyes. Es más, no nos engañemos, están ahí precisamente por eso; porque las astutas políticas del PSOE saben de su edad mental, y conscientes de ello, y estando en sus manos a quien llamar, llaman a quienes saben que no tienen el nivel intelectual suficiente ni como para discutir diez minutos con la mínima coherencia. Puestos a elegir enemigos, es inteligente quedarse con los más tontos.Y ahí está la barrera de los llamados al ministerio: su propia incoherencia argumental, que ha hecho que la mejor baza del PSOE haya sido el juego del “divide y vencerás”. Y a día de hoy, y dados los cálculos de escaños, tienen bastantes papeletas para llevarse el gato al agua.

Alonso, Dans y compañía dicen por la boca pequeña que no quieren ver convertida a Internet en una nueva televisión, cuando son ellos mismos la que la llenan de banners y spots, de Adsense e intersticials, y los que hacen de sus medios algo difícil de distinguir de un anuncio o promoción sin fin, como la teletienda en forma de blog de Julio Alonso, algo que ni siquiera han llegado a concebir las televisiones comerciales en su máxima desesperación por conseguir ingresos publicitarios. Y encima reclaman una libertad de expresión que ellos mismos se pasan por el forro, censurando en sus blogs y medios (puedo dar fe de ello) las opiniones o puntos de vista que no cuadran con sus intereses. Por eso, como muy sutilmente mantenía un comentarista de Enrique Dans cuando éste se quejaba de la Ley Sinde y de su intención de clausurar las webs que vulneren las leyes, es una gran observación la siguiente:

Tengo varias páginas webs, y no tengo ninguna preocupación de que me las cierren. Lo que sí me preocupa, es que cuando voy a ciertos sitios de los que dicen preocuparse mucho por la libertad de expresión y coloco un enlace hacia alguna de ellas, se me califica de “spam” o “troll”. Y eso me pasa en muchiiiiisimas webs y digo muuuuchas.

Y ahí está la clave de la cuestión. Los autoproclamados representantes de los internautas, no están preocupados por la libertad de expresión de éstos, ni siquiera les preocupa que sean cerradas webs (mientras no sea la suya), lo que verdaderamente les preocupa es de que se les acabe el negocio fácil del cortar y pegar, el de ingresar a costa del contenido que ellos no producen, si no que producen otros.

No nos engañemos, los medios de comunicación siempre aspiran a ser de masas, si no no sirven ni para difundir ideologías políticas ni para anunciar nada. ¿Quién quiere un medio de comunicación en el que cada uno diga lo que quiera, si lo que quiere escuchar la mayoría es lo que ellos mismos piensan? Lo contrario, exigiría una actitud crítica que la mayoría de la población española, embrutecida con Belenes Estébanes y fútbol, ya no tiene. Los buenos oradores saben que no hay que confundir a una audiencia entregada presentando los pros y los contras: eso solo es útil cuando la audiencia no está convencida, cosa que nuevamente no es el caso, pues la mayoría de la población se alinea en el “blanco” o en el “negro”, con el“PP” o con el “PSOE”. El adicto al fútbol o a las revistas del corazón no está para muchas sutilezas. Tal vez estamos viviendo la última etapa en la que en Internet cuentan los pequeños, y todavía se les escucha sin manipulación de los de arriba. Cuando que la Internet patria pueda ser explotada comercialmente y pueda dar beneficios, los grandes grupos con cash, o consigiéndolo en connivencia con la banca, comprarán lo que más audiencia genere a golpe de talonario. Una Internet que no sirve ni para el poder político, ni para el económico ni para movilizar al “pueblo” es una Internet que no sirve para nada, es una Internet que será como un mass media tradicional, pero aderezada con un montón de ruido de gente diciendo chorradas inservibles para nada práctico. ¿Internet para la cultura? Se está convirtiendo en un instrumento más para el ocio y el atontamiento. Como en los tiempos de la televisión, todo el mundo intenta aparentar que ve los documentales de la 2, cuando los datos de audiencia dicen que lo que arrasa es el Salsa Rosa.

No obstante tengo la esperanza de que se salven pequeños (o a ser posible grandes) oasis en la red en los que sea posible la discusión seria y sosegada. Pero hay que ser realista, y lo normal sería que una discusión de esas características acabe siendo mantenida solamente por una “inmensa minoría”, que por muy inmensa que sea, siempre tendrá maneras de minoría. La masa seguirá partiéndose el pecho discutiendo en los blogs del Marca, defendiendo con su honor los colores de su equipo de fútbol, o siguiendo embobados las venturas y desventuras de los personajes de la prensa del corazón, o defendiendo a capa y espada su derecho a bajarse el último episodio de “Lost” gratis. Todo ello alentados por los autoproclamados “ilustrados TICs”, que no aspiran a otra cosa que a convertirse en el lobby que actualemente forman los mass meida tradicionales. Y entonces, en medio de su episodio de Lost retransmitido por streaming, saltará un banner que vende una hipoteca a 50 años. Y muchos aplaudirán el “nuevo modelo de negocio”.

Bienvenidos a la “Nación Red”.

Por fin Enrique Dans ha sacado su dichoso libro. Para justificar lo injustificable y esconder la incoherencia de poner en el mercado un libro por el que cobrará derechos de autor, y en obsoleto papel, Dans se despachó con esta entrada en la que intentaba cuadrar el círculo, pero en la que más bien acabó convirtiéndose en el caníbal vegetariano. Si no, no se entiende tanta hipocresía, tanta incoherencia, y tanto afirmar algo y lo contrario, y el decir una cosa y hacer otra bien distinta. Bueno, sí se comprende: Dans siempre ha barrido para casa, y ha intentado exprimir al máximo las tetas de la web 2.0 para llenarse los bolsillos a costa de los pardillos que lo siguen y abrazan sus teorías. En un país normal, después de vérsele tanto el plumero, tendría que haber recogido los bártulos e irse para casa. Pero recordemos que esto es España, y Belén Estéban sigue viviendo década tras década de lo de siempre, y su circo parece no tener fin. Esperemos que con Dans sea distinto.

Curioso también, como alguien que se autoproclama el defensor de los derechos de expresión de los internautas, no me permita publicar ninguna clase de comentario en su blog como “cambiosocialya”, y tenga que esconderme en nicks anónimos para conseguir verter mi opinión de vez en cuando, y cuando al señorito Dans le parece que mis razonamientos no hacen que afloren todas sus incongruencias.

Para terminar de dar el triple salto mortal, Dans publica (en el papel de Expansión, una vez más, y protegido por los obsoletísimos derechos de autor) este panfleto/artículo en el que vuelve a manipular y marear la perdiz para intentar lo imposible: convencer a los demás de lo que ni él mismo se cree.

Vuelve a arremeter contra la Ley de Economía Sostenible, manipulando y ofreciendo argumentos falaces, como siempre. Al lector que tenga cierto interés en el tema, le recomiendo que ponga en duda cualquier “dato” que Dans ofrezca para apoyar sus teorías, porque suele o bien directamente inventarlos, o como mínimo tergiversarlos, a sabiendas de que el lector medio se tragará en bloque lo que diga, sin intentar comprobar por sus medios si lo que se afirma es cierto o no (que casi nunca lo es).

Vuelven los comentaristas afines a Dans a poner el grito en el cielo por una disposición final de la Ley que ni siquiera está en vigor, y que claramente está destinada a acabar con las webs que se lucran con material ajeno, tipo Mininova, Seriesyonkis, y un largo etcétera, sitios que vulneran claramente las leyes internacionales en materia de derechos de propiedad intelectual. Los que censuran en sus blogs, parecen muy preocupados por la libertad de expresión de los internautas, libertad que en ningún momento está amenazada por la ley. Se dice que se pone en manos de una comisión administrativa la defensa de derechos que corresponden a un juez. Cosa del todo falsa, porque solo en una mente deformada por Internet puede caber la idea de que una web con enlaces a películas “expresa” algo más que la voluntad de sus creadores de forrarse a costa del trabajo de otros. Es claro que la comisión intenta crearse para tutelar estos derechos de la única manera eficaz: con la rapidez que precisan, y que un juez no puede darles. Si se esperara a una lenta resolución judicial, el daño ya estaría hecho para cuando recayera sentencia. Sin embargo los críticos con la ley se empecinan en que servirá de excusa para cerrar las webs que al gobierno le venga en gana. En caso de que así fuera, yo sería el primero en salir a la calle para protestar por tal medida. Pero mientras tanto, vamos a darle una oportunidad a una ley que ni siquiera está en vigor.

Todos podemos ser autores en algún momento de nuestras vidas (si lo es Dans, definitivamente lo puede ser cualquiera). Y en ese momento seguro que muchos (como el mismo Dans) ven las cosas desde otra perspectiva, y quieren que sus derechos se respeten. Solo deben temer a la ley aquellos que no crean nada, y quieren lucrase con creaciones de otros