ibmsunComo no podía ser de otra manera, toda la red habla de las filtraciones de las conversaciones de adquisición entre IBM y Sun Microsystems: hablamos de dos empresas históricas en la escena de la tecnología, cuya combinación podría alterar el panorama de la industria.

O no. Y es que como todo, la adquisición de Sun por parte de IBM por un montante de seis mil quinientos millones de dólares en cash plantea luces y sombras. Por un lado, tiene el atractivo de ser una operación motivada fundamentalmente por las perspectivas de futuro de la industria, su más que evidente orientación a eso que se ha dado en llamar “la nube”, y el detalle añadido de incluir a la empresa que más visionaria se mostró en ese sentido con su archiconocido the network is the computer. Por otro, posee las sombras de la posible intervención de las autoridades antimonopolio, y del interés de IBM por eliminar un competidor tras hacerse con sus “joyas de la corona” y vender el resto del negocio. Cualquiera que sea el resultado, tendrá un importante impacto sobre la escena del software libre, dado el fuerte compromiso que ambas compañías tienen con el mismo.

Históricamente, las dos compañías tienen poco que ver. Mientras IBM ha ido reconvirtiéndose cada vez más para ser una compañía de servicios que compite en el terreno de las grandes consultoras, Sun desarrolló su negocio centrándose enworkstations y servidores (fue el proveedor de servidores más importante de la época puntocom), y solo tras el relevo de Scott McNealy por Jonathan Schwartz ha comenzado a centrarse de manera más decidida en la innovación en software y servicios. Sin embargo, la posición financiera de Sun ha ido erosionándose con el tiempo (la mayoría de sus ingresos siguen dependiendo del negocio del hardware), y las filtraciones hablan de aproximaciones recientes a empresas como HP y Dell en busca de voluntarios para una posible adquisición. Una adquisición que, en caso de producirse, sería la más cara de las llevadas a cabo por la compañía y supondría un desvío en su estrategia de dejar de depender del negocio del hardware: IBM obtiene a día de hoy la mayoría de sus ingresos de la venta de software y servicios, y la compra de Sun haría que el hardware representase en torno a un tercio del total. Por otro lado, la fuerza y predicamento de IBM aplicada a productos emblemáticos como Java o MySQL podrían suponer un avance importante en su ya muy significativa difusión. La cartera de productos de Sun está muy orientada a la infraestructura, software y servicios del entorno del cloud computing, y para IBM, sin duda, es un posicionamiento muy adecuado: si quiere asegurarse una relevancia significativa en ese nuevo entorno, la adquisición de Sun decididamente la fortalece. Y además, evitaría que quien llevase a cabo la adquisición fuese Cisco, que también estaría en disposición de hacerlo.

Financieramente, la compra supondría un 100% de premium sobre la última cotización de Sun previa al anuncio, para muchos el coste de hacerse con una de las marcas míticas en el mundo de la tecnología, pero encuentra a una IBM muy bien capitalizada y con más de trece millones en cash. Por el momento, no obstante, la respuesta de los mercados ha sido tibia. En cualquier caso, lo que no cabe duda es que nos hallamos ante una de las operaciones potencialmente más importantes de la historia de la tecnología, con posibilidades de impactar en gran medida el panorama futuro. Habrá que estar atentos.